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El impulso de la conectividad digital y de los servicios públicos esenciales, las oportunidades laborales y la adaptación de la oferta inmobiliaria del entorno rural a la nueva demanda son clave para la creación de oportunidades, también inmobiliarias, en la España vaciada.

Artículo de R.P., publicado en leonoticias.

Uno de los aspectos positivos de la pandemia es el interés creciente por el entorno rural, favorecido por el teletrabajo y por el cambio de prioridades que muchas personas han experimentado en el último año. Es una oportunidad para la recuperación demográfica de la España vaciada y también para poner en valor su mercado inmobiliario, siempre que exista una inversión para hacer accesibles los servicios y para favorecer el empleo.

Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en 14 de las 50 provincias de España el 80% de sus municipios se encuentra en grave riesgo de extinción, y 1.840 pueblos están en riesgo de despoblación irreversible, especialmente en Castilla y León, Castilla-La Mancha, Teruel y La Rioja.

Las cifras demográficas de la España vaciada son alarmantes. Según los últimos datos de Eurostat, de 2016, la densidad de población en España era 92 personas por kilómetro cuadrado, frente a las 177 de la media de la Unión Europea, y en la región de Castilla y León la cifra bajaba hasta las 26,1 personas por kilómetro cuadrado.

Sin embargo, si algo bueno ha tenido la crisis sanitaria es que en este último año muchos pequeños municipios han visto llegar a nuevos habitantes en busca de otro estilo de vida, viviendas más amplias y con espacios exteriores y una mayor tranquilidad.

Un dato que lo corrobora es que el porcentaje de compraventas de viviendas unifamiliares marcó su máximo histórico en el tercer trimestre de 2020, con el 20,43% del total de operaciones, según los datos del Colegio de Registradores de la Propiedad.

En este sentido, la posibilidad de teletrabajar que se ha facilitado a muchos empleados ha sido fundamental para que algunos pudieran regresar a sus lugares de origen y otros pudieran buscar una nueva vida lejos de la ciudad más acorde con sus prioridades.

Según el Instituto de Valoraciones, los compradores de inmuebles en el entorno rural buscan viviendas con espacios amplios y exteriores, con más habitaciones para poder teletrabajar y luminosidad, tanto como primera residencia como para pasar en ellas las vacaciones y amplios periodos de tiempo. Más que una moda pasajera, parece tratarse de un cambio de tendencia que traería consigo una nueva oportunidad para la España vaciada.

Servicios esenciales

Sin embargo, para hacer del entorno rural un destino interesante en el que merezca la pena comprar, es necesario dotar a estos municipios de unos servicios esenciales de los que en muchos casos carecen en la actualidad.

Uno de ellos, fundamental en estos tiempos y que supone una de los objetivos del Comisionado del Gobierno para el Reto Demográfico, es la transición digital y el aumento de la conectividad territorial para lo que se plantea como meta la extensión del 5G en todo el territorio español, la digitalización del medio rural y la reducción de la brecha digital en los centros educativos, así como facilitar la relación digital entre los ciudadanos y la Administración.

Sin duda, la existencia de recursos educativos y sanitarios es una de las condiciones que exigen los nuevos pobladores de la España vaciada. En este sentido, el Comisionado pone como objetivo el refuerzo de los servicios públicos y el impulso de la descentralización.

Junto a los centros sanitarios y educativos, el Plan del Comisionado plantea la necesidad de aumentar en estas zonas rurales las sedes de Justicia, los centros de la UNED y los recursos sociales.

Más allá de aquellas personas que pueden teletrabajar, también las oportunidades laborales son necesarias para el impulso de la repoblación del entorno rural. El turismo rural sostenible, la creación de empresas que aprovechen los recursos del entorno y la transformación digital de la industria o la actividad agraria son oportunidades para estas localidades.

Vivienda a la medida de la demanda

Al margen de estas necesidades básicas que los posibles compradores necesitan ver cubiertas, las prioridades de la demanda han cambiado en este último año, especialmente las de aquellas personas que buscan un cambio de vida, motivados, en parte, por las carencias que han percibido en sus viviendas en la ciudad.

La España vaciada tiene la posibilidad de ofrecer amplios terrenos en los que adaptar la vivienda existente a la demanda actual, que busca inmuebles con terrenos exteriores, terrazas, piscina, viviendas con mayor superficie y más dormitorios o despacho.

La sostenibilidad y la eficiencia energética son otros de los aspectos que tiene en cuenta este público y que también deben incorporarse a la oferta inmobiliaria rural.