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La meta es volver a situar al medio rural, a la dehesa, a sus pueblos y sus habitantes, en el primer plano. El objetivo figura en el convenio que ayer firmaron la Diputación Provincial de Cáceres y el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, y que tiene como destinatario a la joya de la corona del medioambiente en Extremadura: el Parque Nacional de Monfragüe.

El acuerdo contempla invertir 180.000 euros en la zona, en acciones que beneficiarán a catorce municipios: Casas de Millán, Casas de Miravete, Casatejada, Deleitosa, Higuera, Jaraicejo, Malpartida de Plasencia, Mirabel, Romangordo, Saucedilla, Serradilla, Serrejón, Tolril y Torrejón el Rubio. Todos ellos están incluidos en el espacio catalogado como Reserva de la Biosfera, una figura de protección que aparece entre las prioridades del Minsiterio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, según afirma éste en un comunicado.

«La idea -explica el Estado- es apoyar a que cada reserva de la biosfera tenga un plan de actuaciones específico, un plan que, además, pueda ser objeto del correspondiente seguimiento técnico y evaluación científica». Y en el caso del parque nacional extremeño, el proyecto pretende recuperar las actividades tradicionales de la dehesa y difundir el patrimonio cultural del lugar. En definitiva, se trata de «poner en valor» ciertos aspectos ligados a la historia del lugar, que explican su esencia y que con el paso de los años han perdido importancia en el día a día de estos municipios.

Para ratificar el compromiso se juntaron ayer en la sede de la Diputación de Cáceres representantes de la propia institución provincial, del Gobierno autonómico y del central. También acudieron varios alcaldes de la zona.

A partes iguales Los 180.000 euros contemplados como inversión los sufragan a partes iguales la Diputación y el Ministerio. Para conseguir el objetivo de revitalizar las actividades tradicionales, se realizarán varias iniciativas. Entre ellas, visitas guiadas para distintos colectivos, un plan específico de acciones tendentes a recuperar los usos históricos, el diseño de una página web específica sobre la Reserva de la Biosfera y la colaboración con la Universidad de Extremadura para que haya alumnos haciendo prácticas o para la realización de investigaciones en el entorno. Además, en el plan tienen una importancia especial los niños, con acciones dirigidas a los escolares.

 Según Jesús Casas, director general de Desarrollo Sostenible del Medio Rural, lo que se pretende «en definitiva, es que el mundo rural tenga futuro y que la población, no sólo las administraciones, sienta el compromiso con el modelo que se quiere crear para que no abandonen los pueblos».