REDR

Entrevista publicada en el último boletín de FADETA.

El presidente de REDR considera que la Ley frente a la Despoblación de Castilla-La Mancha es una medida "sensible a la realidad rural" y que se ha diseñado pensando en mejorar la vida de la población de una manera directa.

Los desafíos son múltiples. En primer lugar, debemos apostar por mejorar la calidad de vida y el acceso a los servicios de proximidad, para permitir que la ciudadanía elija dónde quiere vivir, sin condiciones. El medio rural no se puede seguir permitiendo el éxodo rural de nuestros jóvenes, son el futuro de los territorios. Es el momento de apostar, de una manera decidida y desde todas las instancias, por las posibilidades que ofrecen los pequeños municipios y comarcas para desarrollar un proyecto de vida. Como ya he mencionado alguna vez, todos los retos de nuestra sociedad pasan por el medio rural.

Es imprescindible apostar por un verdadero rural proofing o mecanismo rural de garantía, que se aplique a todo el proceso legislativo. Los responsables de redactar una Ley deben tener en cuenta la realidad rural desde el momento de su concepción. Además -y esto es algo que llevamos mucho tiempo defendiendo desde REDR- es necesario empezar a cambiar el relato dominante sobre el medio rural. Nos hemos cansado de esa imagen pesimista, negativa, que no se corresponde con la realidad de nuestros pueblos. Las áreas rurales son sitios vivos, llenos de oportunidades, lugares abiertos e inclusivos, innovadores, que acogen a los que vienen de fuera atraídos por mejorar su calidad de vida. Ese es el enfoque que, en mi opinión, más se ajusta a la realidad rural.

 Ha habido pasos significativos en los últimos años, eso es una realidad. ¿Serán suficientes? Es lo que tenemos que plantearnos ahora. Es de agradecer el esfuerzo que se está dando, tanto a nivel público -a partir de leyes y financiación- como a nivel privado -un mayor conocimiento y voluntad de acercarse a los territorios por parte de las grandes empresas-, pero no es suficiente. Efectivamente, la pandemia, pese a la cantidad de cosas negativas que produjo, supuso un punto de inflexión en la manera en la que la sociedad percibía el medio rural.

Como decía al principio, la gente quiere decidir dónde vivir en igualdad de condiciones. Los servicios de proximidad son básicos para lograrlo. Oportunidades laborales, conectividad, movilidad, acceso a una vivienda, servicios sanitarios y colegios, ocio... El diagnóstico ya está realizado. Ahora solo falta crear las herramientas para solventar estos déficits, apoyar los procesos transformadores de emprendimiento a nivel local y apostar por la innovación para salvar todas esas barreras, entre otras cosas.

No solo tienen una importancia fundamental en el desarrollo que han vivido los territorios rurales en las últimas décadas, es que, sin ellos, estoy convencido de que no estaríamos donde estamos. Leader llegó en el momento adecuado, y siempre ha sabido adaptarse a las realidades de cada momento en sus diferentes etapas. Actualmente, me cuesta creer que haya alguna administración o gobierno que no crea en la eficacia de Leader para el impulso y desarrollo socioeconómico de su comarca.

Es necesario un cambio de modelo y de paradigma en la sociedad, necesitamos apostar por un futuro sostenible, y eso es lo que persiguen los ODS. De ahí la importancia vital que tiene dar a conocer e impulsar sus metas. Los ODS se alinean a la perfección con los objetivos de sostenibilidad que persiguen las áreas rurales. Es más, estamos seguros de que, para lograr la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible marcados por la Agenda 2030, es imprescindible contar con las áreas rurales.

Es el reflejo de un trabajo bien hecho, que además ha contado con la participación de entidades que conocen a la perfección la problemática de sus propios territorios, especialmente los Grupos de Acción Local. Es una medida necesaria, valiente, sensible a la realidad rural, y demuestra que se ha diseñado pensando en mejorar la vida de la población de una manera directa. Claro que debería exportarse; de hecho, ya se ha puesto de ejemplo en numerosos ámbitos nacionales e internacionales, como su presentación durante la Conferencia del Pacto Rural Europeo. Muchas regiones españolas se podrían ver beneficiadas de una Ley como la impulsada en Castilla-La Mancha.

Sí, porque sus condiciones demográficas son tremendamente similares. Creo que se debería tener en cuenta esa peculiaridad y ser capaces de flexibilizar o adaptar la norma. La despoblación es uno de los principales problemas de la provincia de Guadalajara, al igual que el de las provincias mencionadas, por lo que los parámetros para medir la población deberían adaptarse a la realidad.

Es una entidad de referencia en la comarca y en la provincia, y estoy convencido de que los vecinos y vecinas sienten que el grupo trabaja día a día por mejorar su calidad de vida. Tras dos décadas de trabajo en favor del territorio, FADETA está completamente integrada en el territorio Tajo-Tajuña y La Alcarria, y ha conseguido logros innumerables. Solo me queda darles la enhorabuena e invitarles a contribuir con su encomiable labor muchos años.