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17/02/2017 Área: Medio Ambiente Fuente: Associació Leader Ripollès Ges Bisaura / ARCA
La Asociación Leader Ripollès Ges Bisaura ya cuenta con dos nuevos contratos clima aprobados este año: la actualización del BM-RURAL y el nuevo BM-CAT. Ambos proyectos, gestionados por el Grupo LEADER, pretenden estimular la instalación de calderas de biomasa en el territorio. A través de los contratos con el MAPAMA, cualquier empresa, ya sea pública o privada de Cataluña, que quiera instalar una caldera de biomasa de tamaño medio o grande podrá adherirse al proyecto y percibir 9,7 euros por tonelada de CO2 dejada de emitir en relación al consumo que tendría para la utilización de combustibles fósiles.
El proyecto BM-Rural está activo desde 2013 y durante la anualidad 2016 se pudieron certificar las emisiones de CO 2 dejadas de emitir de 13 calderas de biomasa instaladas en el territorio de los Grupos de Acción Local. Se ha certificado un ahorro total de 1.067,5 toneladas de CO2 no emitidas a la atmósfera, suponiendo una compensación económica agregada de € 9,170.81 por los propietarios de las calderas. Con la ampliación del contrato, esta anualidad 2016 el próximo mes de mayo se certificarán un total de 58 calderas de nueva instalación.
El nuevo proyecto BM-CAT promovido por el Clúster de la Biomasa de Cataluña y coordinado por la Asociación Leader Ripollès Ges Bisaura, ha sido seleccionado entre 63 proyectos presentados dentro de los programas CLIMA por el conjunto del Estado español. Forman parte de este proyecto los 11 Grupos de Acción Local de Cataluña y la apoyan 18 organismos, entre los que figuran Diputación de Girona, Diputación de Barcelona, el Instituto Catalán de la Energía (ICAEN) y la Oficina Catalana del Cambio Climático (OCCC). La gestión del proyecto se ha financiado por el Departamento de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación a través del proyecto de cooperación entre los GAL que forman parte del ENFOCC.
Durante esta primera anualidad se prevé compensar las emisiones de 55 instalaciones de biomasa de las cuatro provincias catalanas, con un total de 17.591 toneladas de CO2 que conlleva la sustitución de 100 calderas de combustibles fósiles. A lo largo de los cuatro años que durará el proyecto, estas calderas deberán ahorrado un total de 70.364 toneladas CO2 que revertirán en sus propietarios un total de 682.530 euros.
Cada año, al igual que se venía haciendo con el proyecto BM-Rural, se podrán incorporar nuevas calderas de biomasa que se instalen dentro de la anualidad correspondiente, incrementando las reducciones de carbono hasta alcanzar el objetivo del proyecto de 281.616 toneladas de CO2.
Acogerse al proyecto BM-CAT, además, supone un seguimiento gratuito de los consumos de biomasa hasta 31 de diciembre de 2023 y una verificación anual de las emisiones.
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