Saltar navegación. Ir directamente al contenido principal

Está usted en:
  1. Actualidad
  2. Noticias
Bookmark and Share

Noticias

Territorio común. Las redes como espacio de futuro

28/06/2010 Área: Noticias de los Grupos y Redes Fuente: READER

Las redes regionales de desarrollo rural configuran el grueso de la Red Española de Desarrollo Rural (REDR); una red de redes que encarna un espacio común para los Grupos de Acción local de España. Es decir, una estructura tejida por 16 asociaciones de ámbito autonómico que abarca a cerca de dos centenares de grupos de desarrollo rural de la geografía nacional dedicados actualmente a gestionar los fondos de los programas LEADER; instrumentos destinados a fomentar el desarrollo de las zonas rurales a través de la aplicación de la metodología LEADER.

En total, casi el 70 por ciento del territorio nacional unido bajo un espíritu común: el fortalecimiento y diversificación de las actividades económicas y la valorización de los recursos de las zonas rurales para mejorar las condiciones de vida y empleo de la población local. 

El viejo dicho que refiere que la unión hace la fuerza está dando paso a otros términos más positivos y con menos connotaciones combativas. Los nuevos partenariados europeos nos hablan de sinergias, redes, intercambios, buenas prácticas, sin olvidar tampoco que esta suma también estimula la fuerza que se necesita para vencer los momentos delicados, lo que ahora se viene a llamar lobby. Y el desarrollo del medio rural, tan reciente en la historia europea, (principios de los noventa del pasado siglo con la creación de la iniciativa LEADER), necesita más que nunca desarrollarse en red, y a pesar de esa juventud histórica, el asociacionismo ha estado siempre presente en los Grupos de Acción Local y en las comarcas Leader desde su misma constitución. En este sentido, hay que decir que la implantación de los GALs en los territorios supuso una auténtica revolución que rompió con el método tradicional de desarrollo.  Por primera vez el territorio tomaba las riendas de su futuro.

Hace 15 años que surgió la Red Española de Desarrollo Rural (REDR) que ha ido creciendo con el paso de los años hasta consolidarse como uno de los foros fundamentales en la defensa y el desarrollo de la gran mayoría de las comarcas rurales de este país. Y así mismo lo ha reconocido estos últimos el propio Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, al conceder a la red nacional la Placa de Plata al Mérito Agrario por su contribución al desarrollo de este sector. Mérito que el Presidente de REDR, Aurelio García Bermúdez, también extendió a las redes autonómicas. Y es que más de una década llevan también muchas de ellas trabajando en los territorios rurales de Andalucía, Aragón, Cantabria, Canarias, Castilla La Mancha, Castilla León, Extremadura, Murcia, País Vasco, etc. 

Así también lo hizo la Red Asturiana de Desarrollo Rural que, después de 11 años de funcionamiento, es hoy uno de los instrumentos clave para coordinar y aunar las políticas del medio rural en el Principado de Asturias. READER es el interlocutor de los once Grupos de Acción Local que operan en la región,  foro donde se canaliza de primera mano las aspiraciones del mundo rural asturiano. Desde su constitución, la red asturiana además ha ido estrechando su colaboración con otras entidades regionales (CTIC, FADE,FACC, etc) siempre con el propósito de favorecer el desarrollo de los 67 municipios rurales.

Así, lo que ha supuesto este trabajo en red de redes a lo largo de estos últimos diez años, cuáles son las aportaciones de las asociaciones regionales a este objetivo común, qué opinan sus representantes, son algunas de las cuestiones a las que se responden en este reportaje. Sin embargo, es significativo subrayar que este trabajo en red no se ha extendido a todo el territorio nacional, porque si bien se ha consolidado en algunas comunidades autónomas, en otras apenas se está empezando.

Y a pesar de que las redes son, sin duda, las organizaciones que han conseguido situar el desarrollo rural en las mesas de negociación política, también han sufrido duros reveses. Baste como ejemplo citar el desmantelamiento de una red en una comunidad autónoma concreta, y la supresión de sus grupos de acción local asociados.

El hecho de que el actual concepto de desarrollo rural se aleje de la concepción agraria del desarrollo tradicional de la Política Agraria Común para intentar ofrecer una respuesta más integral a los problemas de los escenarios rurales provocó ciertos debates entre los llamados rurales y agraristas, provocaciones estériles pues las redes nunca buscaron desatender al sector agrario dado que todos los actores rurales están condenados a entenderse.

Además, la organización territorial de nuestro país hace más importante, si cabe, la necesidad de contar con una Red nacional que pueda aunar criterios entre Comunidades autónomas pues el fin es el mismo. Ese común es la materia fundamental de la necesidad de utilizar las sinergias y la fuerza de la convergencia para reivindicar unas políticas que eviten que haya territorios de varias velocidades al socaire de las intenciones de cada autonomía.

La REDR se ha consolidado como el lobby de presión de esa España alejada de los centros de poder, al menos territorialmente, y ha logrado convertirse en  portavoz de las reivindicaciones de unos territorios llamados a librar una batalla  diaria de supervivencia. Lo que hace poco tiempo era simplemente el susurro diseminado de muchos es ahora la fuerza de una sola voz que une todo lo rural. Esta lucha por el medio rural se acaba de ver reconocida por el propio Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino que ha concedido a la Red Española la placa de plata al Mérito Agrario.

Es importante recordar que detrás de las redes están los Grupos de Acción local y que éstos están sostenidos por la representatividad de la mayoría de los actores que intervienen en el mundo rural. La red en números es un foro de cerca de 7.000 ayuntamientos, de la casi totalidad de los sindicatos, especialmente de los agrarios, de las cámaras de comercio, de las asociaciones de mujeres, de los jóvenes, de las asociaciones empresariales, etcétera. Es el foro de la verdadera gobernanza.

Gran parte de las Redes Regionales viven tiempos de reflexión sobre qué puede deparar el futuro más allá del año 2015 a los Grupos de Acción Local, aunque en muchas de las mismas el debate empieza a acelerarse, como consecuencia de los tiempos convulsos que actualmente vive la economía, que ha sumido en una profunda remodelación muchos de los pilares sobre los que se sustentan las propias redes. La crisis va a generar que el debate sobre el desarrollo rural y sus agentes deba clarificarse de una manera rotunda para poder llegar a los objetivos marcados por todos.

Pero aún bajo esta singular situación que vive la economía global, lo rural ya no es sinónimo de atraso. Logro al que han contribuido en gran medida las redes regionales, y por extensión sus grupos de acción local. Cada día es más evidente el interés de la sociedad europea en general por todo lo rural, y así se ha ido reflejando en las políticas de la Unión Europea.

Así, las redes se han ido constituyendo como un "ejemplo de solidaridad" tal como explica Miguel Castellanos, presidente de la Asociación Rural de Andalucía. Su fuerza de interlocución sería inabordable -según sus propias palabras-si no existiera esa unión dentro del territorio. De hecho ese reforzamiento de su presencia en foros de ámbito nacional y europeo ha provocado que estas asociaciones autonómicas alcancen actualmente nuevas dimensiones de negociación e interlocución. "Somos un lobby", asegura Secundino Caso, vicepresidente de la Red Cántabra de Desarrollo Rural, y como tal, "hemos adquirido un compromiso con la sociedad a la que representamos".

En términos similares también se manifiesta el Presidente de la Red Asturiana de Desarrollo Rural, Francisco González Méndez, para quien muchos de los cambios que se han producido en el medio rural en la última década se deben precisamente a ese trabajo en red, pues la experiencia de estos últimos años "nos ha permitido ir consolidando organismos de gestión capaces de asumir compromisos, legitimados para cooperar, participar, dinamizar y avanzar en el progreso de estos territorios".   

Las redes también han conseguido en muchos casos salvar una de las grandes dificultades de los espacios rurales: el aislamiento de información al que están sometidos algunos núcleos rurales. Y en este sentido Lourdes Arruebo, Presidenta de la Red Aragonesa de Desarrollo Rural, explica el caso particular de su comunidad, donde se registra uno de los niveles más altos de despoblamiento de la geografía española. "Gracias a la red nuestros grupos comparten experiencias, problemas, conocimiento, etc.; de no existir una asociación de estas características, los buenos resultados alcanzados en Aragón no hubiesen sido posibles", matiza Lourdes Arruebo.

Y si las redes tienen su importancia estratégica en zonas rurales como Aragón, su ubicación en territorios insulares resulta más prioritaria si cabe, tal como ponen de manifiesto Miguel Ricarte, de la Federación Canaria de Desarrollo Rural, y Pep Martínez, de la red balear. Esta transferencia de conocimientos y experiencias es vital para territorios rurales de estas características, especialmente en materia de cooperación, según subraya Miguel Recarte.

Al frente de la Red Española de Desarrollo Rural se encuentra el extremeño Aurelio García Bermúdez, Presidente también de la Red Extremeña de Desarrollo Rural. Alcalde durante años de un municipio rural y gran conocedor de estos espacios, se muestra especialmente satisfecho por la trayectoria nacional y europea que ha alcanzado la Red Española en los últimos años, con presencia en diversos ámbitos de negociación de políticas europeas. Sin embargo, se muestra especialmente preocupado por futuro de las políticas de desarrollo rural.

Un futuro que, según explica Carmen Ochoa, representante del "embrión de red de desarrollo rural en Navarra", pasa por "una puesta en común de nuestra experiencia, pues todo está ya inventado".

En definitiva, un trabajo en red "es totalmente enriquecedor" porque básicamente "aprendemos lo mejor de cada uno compartiendo los mismos objetivos y también los mismos problemas", subraya Vicente Hita, Presidente de CEDERCAM, asociación que representa a los Grupos de Acción Local de Castilla-La Mancha.

Un aprendizaje al que se han sumado dos nuevas comunidades autónomas: Madrid y Cataluña, prácticamente recién incorporadas a la estructura nacional. En este sentido, el Presidente de la red catalana (ARCA), Xavier Casoliva, subraya que trabajar en red es indispensable, especialmente para los territorios más desfavorecidos, y con voz propia para el medio rural, matiza Roberto Cordero, de la red madrileña, que se encuentra en proceso de creación.

Imprimir ficha

Buscador




Copyright © 2008 Red Española de Desarrollo Rural C/ Duque de Medinaceli, 12 1º izda. 28014 Madrid
Tel.: 911 289 748 Email: redr@redr.es

GlobalSTD ISO 9001 System Certified
Sistema gestión certificado